Ya está todo preparado para el XXII Trofeo Peñón de Ifach. Tripulación al completo, barco de regatas de los buenos, y con muchas ganas de llegar entre los primeros a Formentera.

Un grupo de insens… intrépidos amiguetes mostraron su interés en aprender y probar la navegación a vela. Con esta idea hemos organizado las I Jornadas de Cantera Guerrillera (17-18 de abril).

Esperamos que después de esta toma de contacto, a alguno le pique el gusanillo, repita y se convierta en “guerrillero”.

Si deseas saber más de esta u otras actividades, contacta con nosotros.

Ya se acerca la primera regata de altura «seria» del año 2010 para Guerrilla Sailing, ésta vez en aguas andaluzas. Después de nuestra grata experiencia en el curso «RYA/ISAF Offshore» en Gibraltar, tres de nuestros intrépidos componentes se arman de valor y se van a regatear con el «seawolf» y a chapurrear mucho inglés con la tripulación.

Ya falta menos, de momento hemos confirmado nuestra inscripción en el XXII Trofeo Peñón de Ifach. El día 4 de abril saldrá la lista de admitidos, en la que seguro que estaremos presentes.

El barco: IMX 40

La tripu: Como siempre, poquitos y buenos.

La moral: A tope

El «Sailing» de guerrilla, consiste principalmente en utilizar todo el ingenio posible que esté en nuestras manos, para poder estar la mayor parte del tiempo navegando a vela sobre una superficie acuosa, y con el mínimo desembolso económico posible por parte de los interesados.  ¡¡ Navegar a vela es posible, no hace falta ser millonario y está al alcance de todos !!

Como ya saben algunos de nuestros componentes, ya disponemos de «dominio.org»  en internet. Después de estrujarnos mucho los sesos, por fín ve la luz nuestro proyecto definitivo en Internet. ¡ Enhorabuena a los premiados !

Quedan pocos días para nuestra primera regata del Año. Nos vamos a Alicante con un IMX40 (que ya hemos catado alguno de nosotros), a una regata de nivel 2 que organiza el Real Club de Regatas de Alicante. Más detalles en los próximos días.

En 1972, cuatro de los mejores hombres fueron confinados en trabajos tristes por un delito que no habían cometido. No tardaron en fugarse de las empresas en las que se encontraban recluídos. Hoy, buscados todavía por sus jefes, sobreviven como tripulantes de fortuna. Si usted tiene barco de regatas y se los encuentra, quizá pueda enrolarlos.